Ya no conozco como eres
ya no me acuerdo como me hacías reír
la memoria dañada en el tiempo
no consigue ni un momento volver a hacerme sentir.
Te haces esquiva a mi paso
y por más que yo lo intente
no consigo poder verte
ni sentir como se siente
cuando invades sin medida a todo ser.
No me acuerdo de tus armas
sólo veo por las calles, esas risas
esas caras, esas aves que cantan y vuelan
sin parar.
Debe ser que son felices, o por lo menos
saben aparentar.
Quizás algún día experimente,
quizás llegue a poder soñar
quizás algún día te encuentre
y deje de buscar, la felicidad.