Suenan vacías las letras escritas en papel de ilusión
con tinta corrida a lágrima viva.
Plumas inundadas de océanos de sal
donde lo que se escribe se diluye.
Papel que no absorbe ideas
pero aguanta el trazo de la vida hasta que se acaba la linea
o simplemente no hay más papel.
Guerra intensa entre pluma y papel donde ambas pierden,
uno rasgado y otro agotado de tanto sudar tinta sin conseguir nada.
Textos perdidos entre puntos y comas con un punto suspensivo,
infinito.